Esto es algo difícil de decir, así que perdonadme pero no lo voy a releer y puede que haya errores ortográficos o que la gramática no sea especialmente buena.
Mi padre ha muerto de cáncer.
Para los que no lo sepáis, tengo 15 años. Y todavía no me lo creo.
Lo ingresaron a principios de este mes (el día 6 o el 7, no lo recuerdo) y ayer, día 30, fue su entierro.
Al principio no era muy grave. Tenía una anemia tan fuerte que no habría podido ni levantarse de la silla, pero él hasta ese momento había ido a dar paseos en bici de varias horas, había trabajado en el campo aparte de en su trabajo habitual, etc. Es decir, fuerte como un toro. Y los médicos muy desconcertados.
Le hicieron muchísimas pruebas. Hubo una culminante en la que le analizaron un trocito de pulmón. En la operación perdió mucha sangre, y aunque le hicieron una transfusión se quedó bastante débil.
Entonces descubrieron que era cáncer de pulmón. Que tenía el tumor más agresivo conocido que podía tenerse, y que al ser en el pulmón -uno de los peores sitios donde se pueden tener- eso volvía imposible la situación. Cuando iban a empezar el tratamiento empezó a no poder respirar y lo durmieron para que no sufriera. Estaba en coma. Y horas después, falleció.
Cuento esto porque, aparte de que necesito decírselo un poco al mundo, en este blog me abro un poco a mis lectores, y supongo que los que me lean se merecen saber a rasgos generales lo que pasa en mi vida, al menos este tipo de cosas.
El entierro. Iba a poner que fue horrible, pero no he sido capaz, porque creo que a mi padre le habría gustado. Fue horrible para mí. Y para mi hermana.
Para los que no lo sepáis -supongo que la mayoría- tengo una hermana pequeña. 11 años. Creo que no podéis imaginar cómo me sentí cuando, mientras el cura hablaba y mi mejor amiga me daba la mano, mi hermana se agarraba a mí por la derecha, con todas sus fuerzas. Como si no me quisiera dejar escapar. Y es que, joder, lo entiendo. Yo lo estoy pasando mal. Pero ella... es una persona muy, muy fuerte. Pero ella y mi madre se han llevado la peor parte. Mi madre, porque, en fin, ha perdido al hombre con el que llevaba casi quince años casada, y otros tantos de noviazgo. Y mi hermana, porque aunque sea muy inteligente y muy madura, tiene 11 malditos años y a esa edad no hay que perder a nadie. Menos todavía a un padre.
En cuanto murió mi padre, mi madre dijo que no iría a la misa que se suele hacer antes de ir al cementerio al entierro propiamente dicho. "Dios no existe, creo que eso hemos podido comprobarlo hoy. Así que no pienso pisar una iglesia."
Si no hubiera estado mi hermana, quizá me habría quedado con mi madre esperando a después de la misa. No sé si me habría visto capaz de ir sola. Pero como estaba bien acompañada me atreví. No me arrepiento, pero es una de las cosas más difíciles que he hecho en esta vida. Y, de verdad, espero que no os toque hacer algo así hasta que seáis muy, muy mayores, y hayáis podido disfrutar de la vida con vuestros padres durante muchísimos años.
No solté a mi mejor amiga durante toda la misa, y a mi hermana tampoco. Hubo cosas que dijo el cura que no me gustaron un pelo, y que sonaron más ofensivas que otra cosa. Me dolió sobre todo que pasaran a pedir dinero con el cepillo o con lo que mierda fuera eso a mitad de la misa. Sé que lo hacen siempre, pero ¿de verdad era necesario? No era una recaudación, era el entierro de mi padre. Creo que podrían haberlo dejado pasar una tarde. Y después, como si le hubieran pagado por hacer publicidad, dijo no se qué de que pronto serían fiestas. Sí, yo entiendo que mañana empiezan las fiestas grandes de mi pueblo. Pero también podría haberse saltado eso. Creo yo, vamos.
Todo el mundo me dio el pésame, y bueno, por suerte no se me acercó nadie a quien no conociera -no soporto que gente así me diga "lo siento" por alguien a quien igual no conocía, o al menos ni siquiera me conocía a mí-, pero gente que no me caía muy bien, a la que yo tampoco le caía muy bien, o gente con quien simplemente no me llevaba (porque no había surgido la ocasión o porque yo que sé, pero a quien conocía de pocas palabras) también se acercaron a darme dos besos. En fin, muchas gracias a esas personas, porque supongo que lo que necesitaba era un poco de apoyo, y entre todos lo habéis conseguido un poquito.
Mi mejor amigo, Elvis, me sorprendió muy gratamente, porque, sí, es mi mejor amigo, pero después de la misa me abrazó como si no hubiera mañana, lloró conmigo... Es una de las pocas personas con las que sentí que realmente lo estaban pasando mal, que cuando me decían que lo sentían, lo hacían de corazón. Me hubiera gustado darle la mano y no soltarle hasta que me dormí ayer, pero claro, yo iba con mi familia y aún quedaba ir al cementerio, y después a mi casa.
Una chica llamada Sara y yo fuimos mejores amigas durante muchísimos años, en el colegio y en los dos primeros años de instituto. Después, por cosas de la vida nos fuimos distanciando, y aunque hablamos un poco de vez en cuando y nos saludamos en cuanto nos vemos, ya no es lo mismo, claro. Sin embargo, ayer se acercó a darme apoyo tanto como pudo, y eso me hizo pensar en que, a pesar de todo este tiempo separadas, seguíamos estando juntas. Después del entierro hablamos un poco, nosotras dos y una de mis amigas más cercanas, Cho, y juntas me animaron todo lo que pudieron y más. Incluso consiguieron hacerme sonreír. También agradecí mucho la presencia de Valeria allí. Supongo que tiene que haber sido difícil para ella. Perdió recientemente a alguien muy cercano de la misma forma que yo. Así que habría comprendido que no hubiese venido, pero no, ella se clavó allí como un reloj y me ofreció apoyo cuando tocaba.
No dejo de pensar en mi padre. Tenía 47 años -iba a cumplir 48 el 6 de septiembre-. No deja de rondar por mi cabeza todas las cosas que todavía no me había contado, todas las anécdotas que vivió y no me sé, todas las cosas que tenía que decirme cuando fuera más mayor. Y yo ni siquiera le dije "te quiero" la última vez que hablé con él por teléfono, porque no estaba tan mal, porque no sabía que iba a ser la última vez. Recuerdo que le dije que le llevaría cosas de comer, que haría algo expresamente para él y se lo llevaría. Que iría a verlo.
No pude, porque estaba grave y mi madre dijo que era mejor esperar a que se recuperara. No le echo la culpa a ella, ni muchísimo menos, porque lo entiendo y sé que mi padre estaba mejor descansando solo que haciendo esfuerzos conmigo para hablar y sonreír. Pero me siento muy culpable porque, una vez estando justo al lado del hospital, y habiendo yo vuelto de un miniviaje de tres días de la frontera con Francia, una de mis tías, hermana pequeña de mi padre, me preguntó si quería subir a verle. Yo le dije que no, que ya habría tiempo, que en ese momento estaba cansada yo y seguro que mi padre también, y que un día de estos iría con mi madre.
Me da muchísimo miedo olvidarle. Tengo 15 años, joder, me queda mucho por vivir, o eso espero, y vi a mi padre por última vez hace ya varias semanas. Me da miedo olvidar su cara, su voz, me da miedo olvidarlo todo.
Mi padre no era aficionado a los dulces. Sin embargo, mi madre nos compraba a mi hermana y a mí -en teoría era para nosotras- petit suise de Nesquik, y a él le encantaban. Recuerdo que peleábamos -discutíamos, más bien- frecuentemente con él porque decíamos que nos los quitaba, y que esos eran nuestros, que comiera de otros. Ahora parece una tontería como una casa. Y lo es, en fin, pero en ese momento era lógico. Ahora sólo veo a un hombre que, por un dulce que le gustaba, intentábamos quitárselo. Joder, comprendo que se cabreara con nosotras tantas veces. Es horrible que haya tenido que pasar esto para que me dé cuenta. Le regalaría todos los petit suise de chocolate y de todos los sabores del mundo si así pudiera hacerle volver. Lo haría.
Sólo puedo pensar en que ya no podré verle más. No es el hecho de que haya muerto, es el hecho de que ya no está, y no estará nunca más. Es algo aterrador. Nadie más me quitará los petit suise de Nesquik, ni me dará paseos en moto, ni me irá a buscar al instituto, ni podré comprarle revistas de coches, ni de motos, ni me echará la bronca por estar siempre con el ordenador, ni hará un esfuerzo por probar los postres que cocino aunque no le entusiasmen los dulces, ni hará chistes socarrones cuando esté de buen humor, ni me chinchará durante las cenas mientras mi madre y mi hermana se parten de risa, ni podrá ayudar a mi madre con la organización de los terrenos, ni podrá construir nada más, ni la bodega que siempre había querido, ni el mini establo para el caballo, ni nada. No podrá vernos crecer, sobre todo a mi hermana, porque es una pequeña señorita y todavía va a cambiar mucho. No nos verá sacarnos la ESO -en el caso de mi hermana-, ni bachiller, ni la universidad, ni nos verá empezar a trabajar. Si lo hacemos, tampoco podrá ver cómo nos casamos, o cómo tenemos pareja y convivimos con ella. No podrá tener nietos nunca, no podré sentarme con él cuando yo sea mayor y darle la razón por todas esas cosas que me decía hasta hace poco y a las que yo no prestaba atención. No podremos irnos con él de vacaciones, ni regalarle cosas por navidad, ni cenar con él en la peña durante fiestas, ni podré sentarme junto a él en Nochevieja, o en Nochebuena. Ya no tendré que bajar el volumen de la música en mi cuarto porque se va a echar una siesta.
Ahora su habitación esta vacía, vacía como mi madre, mi hermana y yo, porque yo creo que ahora lo único que sentimos es vacío, ese vacío de la pérdida que no puedes llenar ni con comida -aunque mi cuerpo se empeña en intentarlo estos días-, ni con agua, ni con amor de las personas a las que queremos, ni con nada. Es un vacío que sólo podría llenar mi padre.
Mi padre era fuerte como un toro -según me dijo ayer Gabriel, un amigo, "sería capaz de resistir un huracán de pie"-y aún así algo así no ha podido luchar contra él. Si yo fuera buena en ciencias me cambiaría de bachiller sin dudarlo y haría una carrera que me permitiese investigar en cáncer de pulmón y encontrar un remedio, porque he perdido a mi padre. Y eso ni me lo merezco yo, ni se lo merece la gente que le conocía. Y desde luego no le deseo esto a nadie, y de verdad me gustaría que algo así se erradicara.
Estoy cansada y estoy triste, pero estoy extrañamente tranquila. Supongo que es porque, a pesar de todo, todavía no me lo creo. Y en una semana, o dos semanas, o en las que sean, empezaré a echarle de menos. Entonces me daré cuenta de que no puedo, de que es imposible, y lloraré porque aunque vaya a cumplir los 16 años en apenas veinte días, soy una niña. Soy una niña que necesita a su padre y no lo tiene. Así, sin más. De un plumazo.
A los que os ha pasado algo así en la vida... bueno. Qué decir. Que, de verdad, lo siento mucho, y lo digo desde el alma, porque ahora he comprobado que esto duele más de lo que podía pensar. Sé lo que se siente y no se lo deseo absolutamente a nadie. Los que habéis pasado por algo así sois muy valientes. En serio. Sois héroes. Siempre me han gustado las personas fuertes. Supongo que a base de golpes me convertiré en una. Espero que esto me haga un poco más resistente a la vida.
Ahora que ya estoy cansada de llorar, de darme abrazos de oso con mi madre y con mi hermana, de recordarle una y otra vez sin parar, de agotarme físicamente para que cuando me tumbe en la cama pueda dormir enseguida y no pensar en nada más... ahora que estoy cansada de todo eso, voy a tomarme un descanso de unos días -nos vamos a la montaña- y volveré, espero, con las pilas un poquito más recargadas. Aunque son fiestas de mi pueblo desde mañana hasta el día 9, no creo que las celebre mucho, pero de todos modos intentaré aprovechar lo que me queda hasta que, el día 10, empiece mi primer curso en bachiller. Sé que también será una de las cosas más complicadas que haya hecho.
Si alguna vez tenéis un problema como el que tengo yo, o sufrís de cualquier otro modo, de verdad, decídmelo. Seguramente no pueda ayudaros, pero os ofreceré todo mi apoyo. A la derecha tenéis mi dirección de email y no me importa escuchar a la gente, así que no dudéis si os sentís mal.
Muchísimas gracias a todos los que me habéis ayudado. De verdad espero que seáis increíblemente afortunados en la vida.
Y a ti, papá. Te quiero mucho, muchísimo, y siempre te querré. Siempre, siempre, incluso cuando sea una ancianita arrugada y no pueda ni andar. Tarde o temprano me reuniré contigo donde quiera que estés. Te lo prometo. ♥
22 comentarios:
Uniquement je va dire une chose: Vous aurez pour vous tout la éternité. Peu import où il est maintenant. Vraiment, import qui souviennent de lui.
Les mots pour dire ils sont dans votre coeur. Si il est là, il sait ça.
Te kiero diana eres de lo mejor. Ya veras que vamos a salir adelante los dos. Me ha tocado mucho leer tus sentimiento. Eres fenomenal arriva edos animo. Att: Elvis
Lo siento mucho cielo, y no he podido evitar acabar llorando incluso yo, porque mi padre tuvo cáncer la diferencia es que él sí lo superó y que yo era demasiado pequeña como para acordarme. Sé que ninguna palabra de apoyo que yo pueda brindarte desde el otro lado de un monitor servirán de gran ayuda sin embargo hace falta gran valor para escribir lo que tú has escrito. Que sepas que aunque muchos del mundo de internet estemos a muchos kilómetros de distancia, tienes nuestro apoyo, nuestro hombro cuando necesites ayuda, que cuando necesites lo que sea puedes gritar " EXCEPTION" y yo apareceré. Ahora únicamente toca ser valientes y afrontar todo lo que se te presente en especial ayudar a tu hermana y a tu madre, porque la vida no es para nada justa pero es algo que nos toca aprender a golpes y a veces demasiado duros.
No te puedo decir "espero que todo vaya a mejor" porque sé que pensarás que soy una estúpida y una insensible pero espero que con el apoyo de tu gente todo se haga un poquitín menos doloroso.
Merci beaucoup.
Muchas gracias Ell, yo también te quiero muchísimo ♥
Muchas gracias, Marta. De verdad, me alegro muchísimo de que tu padre lo superara, ojalá que todas las personas fueran tan fuertes y tuvieran la misma suerte. Entiendo que desde tan lejos es difícil lanzar unas palabras de consuelo, pero muchísimas gracias por tomarte la molestia de leer y comentar. Gracias por tus palabras de apoyo, y no te preocupes, porque sí, con el tiempo todo irá mejor (:
Un beso a todos.
Hola, cielo.
No te conozco, pero de veras lamento muchísimo lo que te ha pasado. Nunca me ha sucedido nada así, pero tus palabras me han encogido el corazón, me han hecho pensar en lo que sucedería si pasara algo como eso en mi familia.
He comprendido lo que dices de que tienes miedo de olvidarle, creo que ese mismo miedo podríamos tenerlo todos en una situación como esa. Pero también estoy segura de que eso no va a pasar. No vas a olvidarle y lo sé porque mi madre no ha olvidado a su padre después de tantos años.
De nuevo, lamento muchísimo tu situación y espero que, poco a poco, tu familia y tú podáis ir superando una pérdida tan terrible.
Un beso y todo mi apoyo.
Ay, jó, que bonito, no he podido no llorar con el texto -y aún lo estoy haciendo-, me ha tocado el alma.
Decirte que seguro que si te pudiera ver él estaría muy orgulloso de ti, no lo dudo, que se tiene que seguir, pensar en él y cuando menos te lo esperes cuando lo nombres sonreirás mucho.
Y que lo siento mucho, del alma, aunque yo no haya perdido ningún padre ni madre, sólo los abuelos, sin saber muy del cierto lo que sientes tú.
Muchos abrazos enormes, bonita, mejórate :)
Dulce: espero que nunca te suceda, de verdad. Y también espero que tengas razón y de verdad no lo olvide, porque me parece algo terrorífico. Muchas gracias por tus palabras. Un beso enorme.
Viveka: ¡Ojalá lo estuviera! Aún queda un poco de tiempo para sonreír, pero espero poder hacerlo. Es horrible perder a alguien, así que ojalá no tengas que hacerlo hasta dentro de mucho, mucho tiempo, porque al final es inevitable. Un beso grande, y muchas gracias.
Ha sido todo tan rápido...Quiero que vuelva papá y abrazarle. No he podido llorar porque sencillamente no me quedan lágrimas. Te quiero tata.
Sé que no te conozco mucho, que no hemos hablado apenas y que quizá esto te moleste. A mí tampoco me gusta la gente que te dice "lo siento" sin casi sentirlo, así que comprendo cómo te sientes. Pero he estado varias veces a punto de perder a mi padre. Ha tenido tres o cuatro infartos, y si la última vez no hubiese ido al médico, a la mañana siguiente nos le habríamos encontrado muerto.
Sé que nada de lo que te diga va a servirte. Que por muchos ánimos que te de, lo más seguro es que no te ayude, pero quizá esto sí lo haga:
La materia no se crea ni se destruye, simplemente se transforma. Y, aunque tu padre ya no esté, seguirá vivo en la tierra, en las flores o, por muy cursi que suene, en una mariposa.
No te preocupes, porque no le vas a olvidar. A alguien a quien se le ha querido tanto es imposible olvidarlo, y aunque ahora tengas miedo, sabes que no lo vas a hacer.
Así que mucha suerte y sigue adelante... Haz que él se sienta orgulloso :)
Hola guapa, la verdad no tengo mucho que decir, no tengo palabras para expresarme. Me he leído todo de arriba a abajo a pesar de que ni si quiera te conozco y solo quería decirte que te doy todo mi apoyo! Aunque se haya ido físicamente siempre estará con vosotras y algún día -más tarde o más temprano- seguro que volveréis a encontraros!
Muchisima suerte y apoyo para ti y para tu familia.
Muak <3
Elsa: yo sí que te quiero, guapísima. Algún día volveremos a ver a papá. Mientras tanto hay que ser fuerte. Ruge, Niñaleón ♥
Carla: No me molesta en absoluto, faltaría más. Muchas gracias por tus palabras, y siento mucho esos sustos que pudo daros tu padre. Espero que se encuentre bien. Respecto a lo de la mariposa; mi madre, aunque no cree en dios, está convencidísima de que el alma va a alguna parte, así que algo de esa filosofía se ha quedado en mí y quiero pensar que mi padre me ayuda desde donde quiera que esté. Un beso enorme.
Blueli: Muchas gracias por tu apoyo. Yo también espero poder a verle algún día, sería maravilloso. Un beso grande.
No nos conocemos de nada, de hecho he llegado aquí por casualidad, pero ya mereces admiración. Eres muy, muy fuerte.
Lo peor no es morir, es nunca haber vivido. Sigue adelante y haz que se sienta orgulloso, que seguro que lo estará.
Mucho ánimo, de verdad.
Es preciosa la entrada, tranquila, no le vas a olvidar, si quieres a una persona no la sueles olvidar y tú le quieres mucho, así que no va a pasar.
Me ha conmovido el texto hasta el punto de llorar.
Te quiero mucho Diana, espero que lo superes y sigas adelante.
Un beso, Blanca
SrChiflado: Muchas gracias. La vida es un poco perra y a base de cosas como ésta al final sí que me convertiré en una persona fuerte. Gracias y bienvenido a mi blog... siento que hayas aterrizado en la entrada más triste de todas.
Blanca: muchas gracias guapa. Claro que seguiré adelante, ahora tengo mucho apoyo (: un beso enorme ♥
Hola.Creo que nunca te he comentado demasiado pero siempre acostumbro a leer tus entradas.Quería decirte que tu texto me ha llegado al corazón o bueno,lo que sea.Porque yo no me imagino perder a alguien tan importante para mí. Debe de ser... no sé,la verdad.
Pero debes ser fuerte ahora,por tu hermana,por tu madre y por ti. Estoy segura de que vuestro padre querría que seáis felices :)
¡Mucho ánimo!
Como tengo que ser fuerte por ellas me centraré en eso. Creo que me ayudará un poco el hecho de concentrarme en algo, una dedicación siempre hace el tiempo más llevadero. Muchas gracias María.
Hola, se que tu no me conoces y yo a ti tampoco. Una amiga mía ha leído esto y bueno, me lo ha pasado. Sinceramente, me he puesto a llorar como una boba. Como tu dices, se que con este comentario, no voy a arreglar nada, pero te ofrezco todo mi apoyo y más. Yo perdí a un tío. (Si, ya lo se, no es lo mismo que un padre) pero me jode porque no le perdí por una enfermedad, ni por un accidente, ni fuego, nada de eso. . Creo que eres lista y te lo estarás imaginando...Buen
o, solo te digo que tienes todo mi apoyo. Que eres fuerte y eso se plasma. Que lo seas más que nunca.
PD: Soy una amiga de Iris Roche. Bueno, un beso grande...Y todo mi apoyo, de verdad.
Hola, quiero que sepas que yo pase por algo parecido a tu edad. A mi padre le dieron dos infartos cuando yo estaba en cuarto de la ESO, y se lo que se siente al creer que vas a perder a alguien. Por suerte no se fue. Creeme cuando te digo que te muestro todo mi apoyo. He pasado por infinadad de situaciones, como que mi madre tuvo que operarse de un bulto en el pecho hace seis años o que ahora tenga un melanoma. Ademas, mi mejor amiga tambien perdio a su padre de cancer de pancreas. Fue muy duro para ella y su madre y su hermano. A lo que voy es que soy muy empatica (y sensiblera sea dicho de paso) y comprendo lo que dices y sientes aunque sea en una milesima parte. Ella lo ha superado y es increible. Se ha hecho muy fuerte y cuando recuerda a su padre ya no llora, sonrie.
Asi que te lo dire claro: llora todo lo que quieras, no pasa nada si esras triste un tiempo, pero no demasiado tiempo. El no querria que estuvieseis tristes (aunque suene a cliché)
Pd: Dios soy un moco andante, primero con tu entrada y ahora al escribir esto xD. SONRIEEE!!
Anónimo: Muchas gracias por molestarte en comentar de todos modos. Siento mucho lo de tu tío. Aunque no sea un padre, seguro que era muy importante para ti. Gracias, un beso.
María: Muchísimo ánimo para tu madre por lo del melanoma, y siento mucho que tu amiga perdiera a su padre. La verdad es que el cáncer es horrible. Muchas gracias por todo.
He querido pasarme pro aquí porque vi tu evento, y tenia una extraña sensación que era una entrada triste. Quiero decirte, aunque sé que no es de consuelo, que lo siento muchísimo. Yo sentí algo parecido, pero en vez de mi padre, fue mi abuelo. Y dolía mucho. Va hacer casi 6 años si no lo han hecho ya que murió. Yo era algo mas pequeña y no me acuerdo de todo, pero sé que lo pasé fatal. También sufrí algo así. Mi hermano también tuvo cáncer, pero gracias a... (quien sea) está vivo y lo superó. Supongo que, como te he dicho antes, ninguna palabra te consolará, y un "todo va a salir bien" como dice EXCEPTION, no sirve de mucho, pero mucha gente te apoya, y también puedes contar con el mio. Me has hecho llorar, y sentir el dolor que tu sientes, y he de decir que es insoportable, pero que, con el tiempo, todo sanará. Lo echarás de menos siempre, luego cada cierto tiempo. Después en fechas muy señaladas. Y como siempre lo tendrás en el corazón, nunca podrás olvidarte de él. Ni siquiera su olor ni sus manías. Un besazo guapísima. Ánimo.
Hola Dianita!! Va a ser imposible llenar el vacío que deja en todos nosotros la perdida de Carlos, tu padre, pero quiero que sepas que tu tía Blanca y yo estaremos siempre para que lo necesitéis. Un beso para las tres!
Fernando.
B€!t@: Siento mucho lo de tu abuelo. Es normal que fuera algo horrible. Y me alegro muchísimo por tu hermano, ojalá todo el mundo pudiera superarlo así. De todas formas muchas gracias por todo.
Fernando: Muchas gracias tío. Un beso grande.
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