Lionne.

Tú...

No eres tu nombre. No eres tu empleo.

No eres la ropa que vistes ni el lugar en el que vives.

No eres tus miedos, ni tus fracasos... ni tu pasado.

Tú... eres esperanza.

Tú eres imaginación.

Eres el poder para cambiar, crear y hacer crecer.

Tú eres un espíritu que nunca morirá.

Y no importa cuántos golpes recibas,

te levantarás otra vez.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Cap 14 - Ulrik (1/2)

¡Hola, internautas!

Bueno, llevo un tiempo desaparecida. Ha sido a causa de la vagueza del verano y mi ausencia en Agosto, principalmente. No he podido tocar el ordenador en todo el mes, y luego en Septiembre eran fiestas y... en fin, un desastre.
Que sepáis que me han otorgado un premio llamado "Ángeles que te llevan al cielo". Me parece un nombre rebuscado, la verdad xD Pero me lo ha otorgado Papel de Tinta Negra, así que lo voy a hacer público.

En teoría debo otorgarlo a diez blogs más y contestar a la pregunta de: ¿sacrificarías el cielo por una persona importante para ti?
En respuesta a la pregunta... Dado que no creo en el cielo, pues lo mismo me da sacrificarlo o no, la verdad xD
Y, bueno, aquí van los blogs que premio:

-InvaZión (por la historia y los relatos).
-Athenea's Corner (por la historia "Perfume Exótico", por los relatos y por "Pacto de Sangre").
-Angy Vendetta (por la historia "El Bosque").
-Noemi Mj (por la historia "Fuego").

Lo siento, pero no se lo voy a conceder a ninguno más xD Estos son los blogs que he leído últimamente, ustedes perdonen.

Y ahora, sin más dilación... ¡el nuevo capítulo de Lobos de Marfil! ¡Sí, señores, qué sorpresa! xD
Les informo de que es el último (probablemente) que publicaré en el blog, así que disfrútenlo :)




Dolor. Dolor por doquier.

Me hallaba en un huracán de objetos cortantes, armas y balas. Vi de nuevo a cámara lenta cómo una de las guardianas me disparaba, y el pequeño cilindro de metal me atravesaba la carne, haciéndome sentir el fuego del infierno en un punto situado cerca del pecho, al lado del corazón. Noté cómo mi pulmón se desgarraba a la par que un grito de dolor ascendía por mi garganta y asomaba entre mis labios, emitiendo un gemido gutural de auténtico horror y sufrimiento. De pronto, en medio de aquel torbellino de sensaciones, todo se volvió negro y una risa grave y maliciosa resonó en mi cabeza. Un rostro conocido destelló en medio de la oscuridad y sonrió diabólicamente.

—Hilda, vas a morir…

Yago Silverking hizo una mueca burlona y su rostro se congeló. Súbitamente su imagen fue reemplazada por la de Jenna y, alrededor, toda la negrura cobró la forma del interior de mi cabaña.

Contuve la respiración para comprobar si seguía soñando o si me ahogaba al no permitir el paso del oxígeno a mis pulmones. Estaba despierta; espiré.

—¿Hilda?

—Jenna —pronuncié con cuidado. Ya podía hablar más o menos con normalidad, pero la herida me escocía terriblemente. Además, me picaba la garganta.

—Me has asustado —confesó, arrodillada a mi lado—. Hace nada has abierto los ojos de repente y te has puesto a gritar.

Eso explica mi dolor de garganta.

—Escuece —me quejé.

—Bien, eso es que se está curando. En tres días podrás levantarte. Mientras tanto, te quedarás aquí, descansando. Te ataremos a la cama si haces amago de escapar.

—¿Cuánto llevo durmiendo?

Calculaba que, por lo menos, veinticuatro horas. Me notaba bastante descansada.

—Dos días. Y yo no diría durmiendo —dijo Jenna con una mueca—. Más bien inconsciente… o incluso en coma. Casi te mueres, Hilda.

—¿Tan grave ha sido? —alcé una ceja. Habría sido muy triste morir por un simple disparo en mi primera misión.

—La bala te ha atravesado entera, desgarrándote parte de pulmón y astillando una costilla. Ha pasado muy cerca del corazón y has perdido muchísima sangre.

—¿Cuánta?

—He tenido que hacerte una transfusión —declaró, sentándose en el suelo con las piernas cruzadas—. Odrix quería ayudar, pero no es de tu tipo de sangre.

—¿Quién me la ha donado entonces?

—Ulrik —contestó antes de que se hiciera un pequeño silencio.

—Le daré las gracias cuando le vea —contesté, aunque me extrañaba que hubiera sido precisamente Ulrik el que se hubiera ofrecido a salvarme la vida. Era muy raro.

—Bien —contestó con alivio. Probablemente ella y el resto del campamento se habían dado cuenta de que algo de tensión había entre Ulrik y yo. Pero, por lo visto, las apariencias engañan…—. ¿Sabes? Tienes unos amigos muy fieles. Casi todos venimos a verte en un momento u otro del día, pero Odrix y Sangilak no se han separado de ti ni un momento. Después de ellos, Tanaka y yo somos los que más veces hemos venido a verte, aunque en mi caso ha sido mayoritariamente para curarte y evaluar tu estado.

—¿Dónde están los demás? —pregunté. No es que les culpara por no estar conmigo todo el rato (tenían que vivir su vida, al fin y al cabo) pero me extrañaba que justamente no estuvieran allí cuando Jenna hizo el comentario.

—Comiendo. Pero Sangilak y Odrix vendrán enseguida, no te preocupes.

—No lo hago. Muchas gracias por todo.

—Para eso estoy. Pero procura que no te vuelvan a disparar, ¿eh? Has dado mucho trabajo —sonrió, levantándose—. Intenta no morirte mientras no haya nadie, ¿vale? Aguanta por lo menos hasta que venga el rubiales.

Hice un gesto con la mano. Jenna abandonó la estancia y cerré los ojos, cansada. Tan sólo aquella pequeña conversación me había agotado. Al menos el dolor del hombro era soportable…

Poco rato después oí los ruidosos pasos —comparados con los de mi lobo— de Odrix, y segundos después los vi aparecer a ambos en la puerta de la cabaña. El rubio, al ver que estaba despierta, sonrió y se arrodilló a mi lado.

—Eh, ¿qué tal vas?

—Podría estar peor —contesté con sinceridad—. Jenna ha hecho un buen trabajo.

—Sí, suele ser ella la que ejerce de enfermera. ¿Estás cansada?

—Un poco —confesé, acariciando el pelaje de Sangilak con la yema de los dedos—. ¿Tú estás bien?

—Sí, sí, perfectamente. No te preocupes por mí.

—Todos los demás están bien también, ¿no?

Estaba preocupada sobre todo por Phoebe y Pécala, que eran las más jóvenes y seguramente no habrían visto nunca una herida de tales magnitudes, ni esa cantidad de sangre brotando de un cuerpo.

—Sí, bien.

—¿Jenna me ha cambiado de ropa? —inquirí, mirando mi cuerpo por primera vez. Alguien había sustituido mi traje negro y mis botas por un pantalón corto de color blanco y una camiseta de manga larga en el brazo bueno, pero sin un simple tirante en el malo. Probablemente servía para no entorpecer el vendaje. Aunque estaba descalza.

—Sí. Aún curada y con el vendaje, tenías un aspecto muy tétrico con la ropa bañada en sangre, ¿sabes? Así que te vistió con parte de sus pertenencias. Lamentablemente no tenía zapatos de sobra, pero de momento no los necesitas. Tengo entendido que alguien está lavando todas tus prendas. En cuanto vuelvas a caminar podrás vestirte como siempre.

—Diles gracias a todos de mi parte. No deberíais tomaros tantas molestias en mí —expresé lo que sentía; sobreprotección.

—No les digas que dejen de cuidarte. Por un lado, te lo mereces. Y por otro; creo que les mantiene ocupados. Tendrías que haber visto las caras que pusieron cuando te traje. Estaban muy asustados. Así se sienten más útiles.

—Entonces les daré las gracias personalmente —dije lentamente, notando que los párpados iban a cerrárseme.

—Como quieras. ¿Tienes sueño?

—Un poco.

—Te dejaré descansar —repuso, levantándose.

—No —le agarré la mano de golpe y se la sujeté con fuerza—. No, quédate.

—Está bien —volvió a su posición inicial—. Que duermas bien.

Cerré los ojos y me dejé arrastrar.

—Odrix —le llamé antes de perder el conocimiento. Mi voz sonaba lejana y extraña.

—¿Sí?

—Gracias por sacarme de allí con vida.

—Si no lo hubiera hecho —respondió— nada tendría sentido ahora.

7 comentarios:

Esperanza Luque dijo...

¡Me encantó! (Excepto lo de que es el último capítulo que subes, eso no me ha agradado nada. Cuando tenía mi otro Tuenti ya te seguía y me encantaba :D Te seguía con mi otro blog (el cual ya borré)

Angie dijo...

Muchísimas gracias!!!! es genial recibir un premio de tu blog!!!
sigue así y espero poder ponerme pronto al día!!!!
Un beso enorme!

Kirtashalina dijo...

Esperanza: Muchas gracias. Ya sé que no os agrada, pero es que este año quiero ponerme a estudiar en serio para estar preparada para bachiller, y mantener la novela al día me cuesta mucho... además de que si en un futuro la quiero publicar, no la puedo tener colgada en el blog xD

Angy: De nada, te lo mereces :)

Un beso a las dos! ^^

Anónimo dijo...

Oooh!! Muchas gracias cielito por acordarte de mi y concederme el premio!! O.O Y muchas, muchas, muchas felicidades porhaberlo ganado, te lo mereces =D Besotes

Kirtashalina dijo...

De nada, Esther, y muchas muchas muchas gracias *-*

Un beso :)

Nandfr dijo...

Torpeeee, qué es una torpeeee! Recibir el balazo la primera mision, sí es que... Torpeeee XD.
Jooo, pues yo quiero más, aunque sea sólo un poquito =(

Kirtashalina dijo...

Jajajajaj oye, qué le vamos a hacer xD Estaba nerviosa y punto! e.e

Aún falta la otra mitad del capítulo! :D